En Francia.
Un mal día, pero con muy buena fortuna fue el que vivió el Equipo Grez, integrado por los hermanos Benjamín y Cristóbal Grez Ahrens, quienes sufrieron una colisión, afortunadamente sin consecuencias graves, pero que les significó una penalización que los deja en el 33º lugar provisional tras la segunda jornada de la Copa del Mundo ISAF (International Sailing Federation), que congrega a los más destacados especialistas de la vela olímpica en la bahía de Hyères, Francia.
Los navegantes de la Cofradía Náutica del Pacífico (Algarrobo), quienes habían obtenido destacados resultados en las pruebas inaugurales, incluido un top ten parcial, anotaron un 33º y un 35º lugares en los primeros recorridos de este jueves. Sin embargo, en el tercer track protagonizaron un incidente que, aunque no les permitió finalizar la regata, sumándoles una penalización de 41 puntos negativos, bien pudo haberles provocado lesiones importantes que lamentar.
“Teníamos harto viento, de 15 a 20 nudos de intensidad (casi 40 kilómetros por hora), y en las primeras regatas veníamos bastante bien, pero en la parte final nos quedamos un poco atrás. Hasta ahí, un día difícil pero normal”, comentó Cristóbal, proel de la embarcación chilena, que suma 113 puntos negativos en seis pruebas (un descarte).
“En la última, estábamos navegando entre los 20 primeros y entrando a la línea de meta tuvimos un choque fuerte con un equipo italiano. Y una vez tumbados, nos chocó un velero australiano, que no nos pudo esquivar… Nos penalizaron y a nuestro bote se le hizo un forado, pero ¡mañana va a estar listo para correr! Benja salió bien machucado, pero por suerte no le pasó nada grave. Mientras flotaba, por poco casi le pasa por encima otro bote. Podríamos estar lamentando un accidente mucho peor, así que no podemos quejarnos. Seríamos mal agradecidos”, agregó el mayor de los hermanos de la dupla que cuenta con el apoyo de MBI Inversiones, Volvo, Clínica MEDS, CORDEP, Broota, la Federación Chilena de Navegación a Vela y el Instituto Nacional de Deportes.
Al Equipo Grez todavía le restan dos jornadas y otras seis pruebas, hasta el sábado 25, para completar su primera participación en el actual formato de Copas del Mundo, a las que ahora se clasifica por resultados en los eventos emblemáticos y no por mera inscripción. Eso significa que los primeros 30 cupos se asignan a las mejores duplas del Ranking Mundial y los 10 restantes se entregan por méritos deportivos entre centenares de interesados. De esta manera, el nivel de la flota se asemeja a lo que los deportistas encontrarán en los Juegos Olímpicos.
EL EQUIPO GREZ
Los hermanos Grez Ahrens son sobrinos nietos de la medallista olímpica Marlene Ahrens y en febrero pasado iniciaron su campaña para conseguir un cupo en los Juegos Rio 2016, avalados por sus innumerables éxitos deportivos. Entre otros logros, Benjamín fue múltiple monarca en la categoría Optimist (para menores de 15 años) y ha sido el único chileno que ha conseguido el vicecampeonato mundial (2007, Italia), a lo que se suman sus medallas de bronce en mundiales de la categoría olímpica 420 (Junior 2009 y Adulto 2011), incluida su clasificación a los Juegos Olímpicos Londres 2012 en la clase 470. En tanto, Cristóbal exhibe en su palmarés el título nacional de Optimist 2002, plata juvenil en el Sudamericano de Láser 2004, vicecampeonato en el Sudamericano 2006 de veleros Lightning, y Top Ten mundial y medalla de bronce en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 en la modalidad J-24.
Benjamín, de 22 años, congeló su carrera de Ingeniería en la Universidad Católica y Cristóbal, de 27 años, renunció a su trabajo como Ingeniero Comercial en MBI Inversiones, para dedicarse ciento por ciento a este proyecto.
La edad de ambos deportistas les permite proyectarse a largo plazo en la navegación y, por otra parte, les entrega la experiencia necesaria para lograr la hazaña de clasificar a Río 2016. Para ello, cuentan con el apoyo de la empresa privada, a través de MBI Inversiones, Clínica MEDS, Volvo y CORDEP, junto con el patrocinio de Broota y la Federación Chilena de Navegación a Vela, además del Instituto Nacional de Deportes.
EL BARCO
El 49er (en inglés forty-niner), es un velero olímpico biplaza (para dos tripulantes), diseñado por el australiano Julian Bethwaite y definido como una revolución en la vela ligera internacional; entre otras cosas, porque ambos navegantes gobiernan y estabilizan la embarcación mientras se cuelgan para contrarrestar la escora (la inclinación del bote) y utiliza un Spinnaker (vela globo) asimétrico de gran superficie.
Mide 4,995 metros de eslora (largo del casco), de manga (ancho del casco) tiene de 1,690 a 2,90 metros (posee alas retráctiles) y pesa de 62 a 92 kg. El mástil alcanza los 8,10 metros de altura, su vela mayor cuenta con 15 m2, el foque 6,20 m2 y su gennaker (spi asimétrico) es de 38 m2.
Cuando apareció el 49er, muchos especialistas lo calificaron como un barco “imposible”. Algunos regatistas lo probaron y se sumaron a esa opinión. Era tan diferente de todos los demás… Sin embargo, en la actualidad es uno de los barcos de mayor prestigio en mundo, al que se le reconoce por haber añadido high performance, velocidad y espectáculo al deporte náutico, pues presenta un altísimo grado de exigencia a sus tripulantes y representa un gran desafío físico, técnico y deportivo.