Es momento de andar en bicicleta.
Cerrar calles y crear circuitos ad-hoc para ciclistas ya es costumbre en muchas ciudades del mundo, y cada día también es más frecuente en nuestro país. Tendencia que se suma al creciente uso de ciclovías, que permiten que muchas personas comiencen a movilizarse en dos ruedas en forma diaria y más segura.
Este cambio paulatino no sólo lo aplaude la sociedad en su conjunto, sino también los mismos ciclistas que ven reflejados los beneficios en su propia salud, al ver que consiguen tener, por ejemplo, mejor estado físico y anímico, y menor peso. Algo que avala el Estudio del Proyecto Pasta (sigla en inglés de Actividad Física a través de Aproximaciones de Transporte Sustentable), proyecto financiado por la Unión Europea y liderado por un grupo internacional de expertos, incluida la Organización Mundial de la Salud, el cual indica que quienes optan por trasladarse en bicicleta son en promedio 4 kilos más livianos que los que se mueven en automóvil.
Con estos antecedentes, que siguen confirmando los grandes beneficios que tiene este tipo de ejercicio para la salud de las personas, es que muchos tenderán a seguir los consejos para cambiar sus hábitos de transporte.
Precauciones al andar en bici
Con la llegada de la primavera comenzamos a tener días más cálidos y también más largos luminosos, lo que puede motivar a muchos para desempolvar la bicicleta y comenzar a usarla para ir al lugar de estudio o de trabajo.
En este contexto, cabe preguntarse: ¿Cuáles son las precauciones que debe considerar una persona al decidir usar la bicicleta como medio de transporte?
“El peligro de sufrir algún accidente aumenta si los conductores de vehículos más grandes no tienen consideración al pasar por el lado de un ciclista, quienes son los que están más vulnerables, sobre todo cuando se comparten las vías por donde se transita. Debido a lo anterior es que se sugiere, tanto para el ciclista común como para el deportista, la utilización de casco de seguridad, elementos reflectantes, luces frontales y traseras y, por sobre todo, el considerar nunca adelantar a un vehículo por la derecha”, señala Pedro Leal, jefe de carrera de Técnico de Nivel Superior en Prevención de Riesgos de la Universidad del Pacífico.
En el caso de quienes utilizan la bicicleta como medio de transporte para dirigirse a su lugar de trabajo, es fundamental que conozcan la ley. “Los ciclistas deben tener en cuenta que la Ley 16.744 cubre los accidentes de trayectos, es decir, aquellos que ocurren en el viaje directo entre su domicilio y el lugar de trabajo recíprocamente, siempre y cuando el recorrido sea racional y no interrumpido. En ese sentido, la persona debe explicar el contexto del accidente, detallando día, hora y lugar, adjuntando medios de prueba como un parte policial, constancia de Carabineros o testigos. Incluso una declaración del afectado puede constituir un medio de prueba suficiente si se encuentra debidamente detallada, en la medida que permita probar lo acontecido”, explica Leal.
Por lo mismo, el docente de Prevención de Riesgos de la U. del Pacífico plantea que debe existir una responsabilidad compartida entre los trabajadores y la empresa, respecto a crear una cultura preventiva en los conductores de bicicletas. “La difusión a través de afiches, volantes informativos, dípticos, etc. sobre la prevención de accidentes de trayectos, deben generar conciencia y poner en alerta a ser más cautelosos al momento de conducir una bicicleta, acompañado de una pequeña charla en seguridad vial para ciclistas en la organización”, dice el especialista.
Finalmente, para apoyar el uso sin riesgos de la bicicleta, el experto agrega otras básicas pero relevantes recomendaciones que los ciclistas no deben olvidar:
• Siempre utilice rutas y vías destinadas para el uso exclusivo de bicicletas.
• Recuerde realizar las mantenciones correspondientes a su equipo.
• Evite el uso de reproductores de música mientras se conduce, para estar siempre atento a las condiciones del tránsito.