Ambas son metas saludables, pero volverse activo podría ofrecer incluso más beneficios, encuentra un estudio.
Los adultos mayores que deseen mejorar la salud de su corazón quizá deban enfocarse primero en el ejercicio, sugiere un nuevo estudio.
La investigación encontró que volverse activo podría hacer más por la salud cardiovascular en los adultos mayores que perder peso.
"Cualquier actividad física es positiva para la salud cardiovascular, y en las personas mayores de todos los pesos, caminar, ir en bicicleta y hacer las tareas del hogar son buenas formas de seguir moviéndose", planteó la autora del estudio, la Dra. Klodian Dhana, en un comunicado de prensa de la revista European Journal of Preventive Cardiology. Los hallazgos aparecen en la edición del 1 de marzo de la revista.
En el estudio, el equipo de Dhana siguió los resultados de más de 5,300 personas durante 15 años. Los participantes tenían entre 55 y 97 años de edad, y estaban libres de enfermedades cardiacas al inicio del estudio.
Durante el seguimiento de 15 años, un 16 por ciento de los participantes desarrollaron problemas del corazón.
En ese grupo de personas mayores, los investigadores no encontraron un vínculo entre el índice de masa corporal (IMC) independiente y la enfermedad cardiaca. El IMC es un estimado de la grasa corporal basado en el peso y la estatura: mientras más alto es el número, más grasa hay.
Pero el estudio sí encontró que la actividad física se vinculaba con un riesgo más bajo de enfermedad cardiaca, independientemente del IMC de la persona.
"El sobrepeso y la obesidad se asocian con un riesgo más alto de enfermedad cardiovascular y se recomienda perder peso", dijo Dhana, investigadora postdoctoral en el Centro Médico de la Universidad de Erasmus en Róterdam, Países Bajos.
Pero "en las personas mayores es ligeramente distinto porque la pérdida de peso, sobre todo la no intencional, se asocia con la pérdida muscular y la muerte", explicaron los investigadores.
Dijo que los autores del estudio no refutan la idea de que el sobrepeso y la obesidad pueden aumentar el riesgo cardiaco en la población general.
Pero "nuestros resultados muestran que la actividad física tiene un rol esencial en la salud de las personas entre la mediana edad y la vejez", señaló Dhana. "Los que tienen sobrepeso y son obesos sin una actividad física adecuada tienen un riesgo más alto de desarrollar una enfermedad cardiovascular".
Las directrices de los expertos recomiendan actualmente 150 minutos por semana de actividad física moderada para reducir el riesgo de enfermedad cardiaca, comentó.
© Derechos de autor 2017, HealthDay