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Tener un sistema inmunológico fuerte es vital para una buena salud y una dieta equilibrada es un componente clave. Según, Kristy Appelhans, Vicepresidenta Mundial de Seguridad del Consumidor de Herbalife Nutrition, las personas están asumiendo cada vez más la responsabilidad y el control de sus dietas con alimentos que no solo son deliciosos, sino también nutritivos.
“Los consumidores también quieren suplementos alimenticios de calidad que agreguen nutrientes esenciales a su dieta, mientras que otros pueden estar interesados en productos de reemplazo de comidas para lograr un peso saludable o para respaldar su estilo de vida activo y saludable”.
Un estudio reciente de Euromonitor*, reveló que los consumidores están cada vez más interesados en su bienestar: las vitaminas y otros suplementos dietéticos, especialmente aquellos orientados a la inmunidad, han visto alzas en la demanda. Como resultado, la industria de los suplementos se ha enfrentado al desafío de brindar más acceso a la información.
Pero con tantos productos en el mercado, a menudo existe información confusa sobre su seguridad y eficacia. ¿Cómo pueden los consumidores confiar en las afirmaciones de un producto cuando fuentes de noticias aparentemente creíbles a veces contradicen estas afirmaciones?
A continuación, Appelhans ofrece algunos consejos que te ayudarán a seleccionar de manera informada tus suplementos alimenticios:
1. Revisa los ingredientes: El primer paso para convertirte en un consumidor informado es revisar los ingredientes del producto. Investiga un poco para sopesar los pros y los contras, y también mira lo que dicen los expertos. Si la marca tiene un portal de atención al cliente o preguntas frecuentes, averigua:
Cómo obtienen los ingredientes
Cómo fabrican sus productos
Si el producto es compatible con tus condiciones específicas, restricciones dietéticas u otras preferencias
Si hay algún ingrediente adicional que debas conocer.
2. Evalúa la reputación de la marca: El mercado está lleno de nuevos productos nutricionales con interesantes afirmaciones que prometen resultados convincentes. Antes de agregar un nuevo producto a tu dieta, tómate el tiempo para investigar la compañía a la que estás comprando un producto. Aquí hay algunas preguntas que debes hacer:
¿Cuánto tiempo ha estado la compañía en el mercado?
¿Tiene un grupo de asesores de buena reputación, como un consejo asesor científico?
¿Están cumpliendo o superando las expectativas de las Buenas Prácticas de Fabricación?
¿Ha recibido la empresa algún premio o reconocimiento de la industria por la calidad del producto, la investigación o el servicio al cliente?
¿Respaldan sus productos con garantía?
Si bien probar nuevos productos es genial, es mejor confiar en los productos de una empresa con una larga trayectoria de resultados y compromiso con los estándares de calidad.
3. Compara tus opciones: Ya sea que estés comprando en una tienda minorista o en línea, encontrarás una gran cantidad de productos nutricionales que son fáciles de consumir: batidos de proteínas, refrigerios saludables y otros suplementos y bebidas.
Al seleccionar entre la amplia gama de opciones, tómate el tiempo para explorar el nivel de pruebas que la empresa realiza a sus ingredientes, las certificaciones de terceros (como NSF e ISO) y su transparencia de fabricación. Dichas pruebas son fundamental para garantizar que tus suplementos, vitaminas y otros productos nutricionales se fabrican con el mayor cuidado.
“Tómate el tiempo para investigar. Revisa los ingredientes. Lee el sitio web de la empresa y descubre cómo la empresa obtiene los ingredientes para sus productos. Revisa si la empresa tiene un consejo asesor de buena reputación y, finalmente, ten en cuenta que incluso los estudios científicos pueden estar sesgados. Sé el mayor defensor de tu salud y vive tu mejor vida equipado con información fidedigna”, concluye Kristy Appelhans.
