Unos 20 minutos estuvo detenido Francisco Chaleco López (Red Bull / Can-Am Factory Racing) durante la especial de la Etapa 10 que hizo pensar lo peor: que no continuaba la carrera. Sin embargo, gracias al gesto del brasileño Rodrigo Varela pudo continuar la prueba y mantener el tercer lugar en la clasificación general, pero lejos de Cristina Gutiérrez (2ª) y del aún líder, Mitchell Guthrie.
Fueron minutos eternos para Chaleco y su navegante Juan Pablo Latrach, quienes rompieron tres neumáticos y se quedaron sin auxilio, y botados en el desierto saudí. Ha sido la pesadilla de la dupla chilena que en prácticamente todas las etapas han pinchado alguna goma lo que los ha perjudicado para estar más cerca del primer lugar.
Una vez en la meta del día, López Contardo llegó en el 19° lugar a 45 minutos 12 segundos del ganador de la jornada, el brasileño Marcelo Gastaldi, con una ventaja de 1’26” sobre el argentino Nicolás Cavigliasso y 6’33” sobre el trasandino David Zille.
Con este inesperado resultado, Guthrie continúa a la cabeza de la categoría Challenger con 46 horas 01 minuto 50 segundos, seguido de la española Cristina Gutiérrez a 28’03” y del nacional Chaleco López a 01:13’48.
“Fue un día difícil. Tuvimos el percance de romper dos ruedas y una tercera goma con llanta incluida porque había mucha piedra en la ruta. Nos quedamos sin auxilio para el recambio. Gracias al brasileño Rodrigo Varela pudimos seguir porque nos pasó una de repuesto. La Etapa 11 será más dura todavía, con mucha piedras y rocas, así que no será fácil. Vamos a intentar ir tranquilos. Nos ubicamos en el tercer puesto peleando los primeros lugares y el objetivo es llegar. Estamos acá, contentos… Lo importante es que sacamos la etapa adelante”, explicó un optimista Chaleco López.
El diseño de la etapa fue con un recorrido en bucle por los alrededores de AI Ula y con salida y llegada en el bivouac que congregó hace menos de dos semanas a todos los pilotos. El tramo apuntaba a que fuera un recorrido de 371 kilómetros de especial más que complicado sobre un terreno arenoso y en ocasiones en tramos pedregosos, siempre con la necesidad de descifrar las sutilezas del roadbook.
La etapa 11 de este jueves 18, la penúltima del Dakar entre Al Ula y Yanbu, será la más deportiva de la segunda semana y podría mover el orden del podio en todas las categorías. Con 587 kilómetros de longitud, de los cuales 480 serán de especial, se disputará principalmente en un terreno inhóspito y quebrado. Para los pilotos de autos que soportaron la segunda etapa del año pasado pueden prepararse para mantener la compostura. Según la organización, se registrará el mayor número de pinchazos.