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Colo Colo pide un respiro. Y es que el elenco de Macul no ha tenido descanso durante las últimas semanas en una serie de partidos que lo llevarán a jugar 8 duelos en solo un mes, algo que por un lado, demuestra el buen trabajo del cuadro dirigido por Jorge Almirón, pero que por otro, también hace pensar en las consecuencias físicas que esto podría traer para los jugadores colocolinos.
Y es que todo inició el pasado martes 24 de septiembre cuando el conjunto blanco disputó la vuelta de los cuartos de final de Copa Libertadores ante River Plate en el Estadio Mâs Monumental del elenco trasandino, iniciando así una seguidilla de encuentros que finalizarán recién el jueves 24 de octubre en el marco de la vuelta de la final de la Zona Centro Sur de la Copa Chile ante Magallanes.
“En un deporte que tiene contacto, como es el fútbol, la problemática no es la recuperación desde el punto de vista energético, sino que muchas veces hay golpes, caídas, contusiones y exigencias, muchas veces articulares, un poco más extremas. Por lo tanto, cuando hay poco tiempo de recuperación para ese tipo de condiciones, hay más riesgo de lesión”, explica el experto en hidratación y Director del Gatorade Sport Institute en Chile, Jorge Cancino.
La interminable serie de duelos comenzó el martes 24 de septiembre, cuando enfrentaron a los rioplatenses por el certamen internacional, para posteriormente ser locales ante Cobresal (28/09), recibir a Universidad Católica (03/10), ser anfitriones frente a Audax Italiano (06/10), viajar a la Región del Biobío para ser forasteros de Huachipato (13/10), luego visitas de Unión La Calera (16/10), para nuevamente ser foráneos ante Palestino este domingo 20 de octubre y así finalmente cerrar contra Magallanes el martes 24 por la copa doméstica. Aunque este último encuentro podría ser reprogramado dado que el Estadio Monumental será sede de las próximas elecciones.
La alta competencia y los entrenamientos
Si bien los equipos de fútbol generalmente no detienen sus entrenamientos por períodos prolongados de tiempo, la exigencia que existe entre lo anterior y los duelos oficiales es un punto a considerar, según apunta Cancino.
“Los entrenamientos están planificados. Hay días que son suaves, otros días que son más altos, hay un día más físico, hay un día más técnico- táctico, por lo tanto, en ese sentido la preparación semanal de los jugadores va y se condice con lo que hacen en el partido”.
Lo cierto es que el ‘Cacique’ se apronta a cerrar un segundo semestre muy cargado de partidos y torneos estando aún con vida en dos de los tres frentes que quedan por acabar, como lo son el Campeonato Nacional y la Copa Chile, pudiendo finalizar 2024 al cumplir con gran parte de los objetivos trazados a inicios de año por Jorge Almirón y su cuerpo técnico.
